Cuando en dos grandes blog de referencia como son los de Cris (Kanela y Limón) y Silvia (Mi Dulce Tentación) ves que tienen este pastel que además pone "inteligente" no queda por otra que probarlo, ya se sabe la curiosidad mató al gato, pero si estas dos blogueras recomiendan que se haga, y además ves que tiene una pinta estupenda (por cierto a ellas les quedo mejor), no queda por otra que liarse la manta a la cabeza y ponerse al lio. El resultado ES-PEC-TA-CU-LAR, las tres capas que se forman durante el horneado pese a ser una única masa es lo que hace de este pastel que adquiera el calificativo de inteligente, el se sabe colocar, tiene un regusto como a quesada pero con la textura superior de bizcocho. 

Se que en casa se volverá a preparar porque nos ha encantado, bueno aunque creo que los que mas lo han agradecidos han sido Rubén y Sonia, porque últimamente les tengo de conejillos de indias y les dí una buena cantidad.

Batimos las yemas junto con el azúcar y la esencia de vainilla hasta tener una crema espumosa. Después se añade la mantequilla, la leche y se mezcla bien. Agregamos la harina tamizada y la ralladura de limón que mezclaremos bien todo junto.

Por último se incorporan las claras con movimientos envolventes.

Volcamos sobre un molde engrasado yo he utilizado uno de 20x30x6 (pero tenía mucha cantidad de masa y me han salido 2) aunque Silvia usó uno de 25x25x6, no se que habrá pasado.

Introducimos en el horno precalentado a 180ºC durante 10 minutos, después bajamos la temperatura a 160ºC y dejamos otros 50 minutos. Está listo cuando al pinchar salga el palillo limpio.

Dejamos enfriar totalmente y cortamos en porciones. Según Cris no se puede desmoldar.

Bueno que nos metemos en la última semana de noviembre, dentro de dos días como quien dice estamos metidos en las navidades sin darnos cuenta. Yo la verdad es que llevo unos meses que se me pasan volando, desde que nació el peque, lo que si me he dado cuenta de la época en que estamos por el frio que hace, hoy creo que la temperatura máxima que nos dan es de 7º.  Asi que con estas temperaturas si que apetece encender el horno.

No me he puesto ha pensar las tartas de queso que he preparado, pero son unas cuantas. Ya sean en frio como al horno y el resultado siempre es de lujo. Esta  de requesón, realmente la receta era con ricotta pero yo le he cambiado a un queso mas nuestro. No es una tarta común, tiene un sabor que se parece a la quesada aunque su textura es totalmente diferente.

Os recomiendo probarla además es sin gluten.

Precalentamos el horno a 150ºC, y engrasamos un molde desmoldable redondo de 23 cm. Reservamos.

En un bol grande se bate el requesón junto con el mascarpone hasta que tengamos una textura suave, después se añade el azúcar y la maizena mezclamos todo bien.

Cuando tengamos una mezcla homógena se van agregando los huevos poco a poco mientras se bate bien. Después se agrega la vainilla, canela, el limón y la sal.

Se vierte la masa en el molde que ya teníamos preparado, e introducimos en el horno de 50-60 minutos o hasta que tarta de queso esté firme al tacto.

Una vez lista se retira la tarta del horno y dejamos enfriar en el molde a temperatura ambiente para terminar cubriendola con papel film o de aluminio y la metemos en el frigo hasta su consumo. 

Ya conoceis mi adicción al chocolate asi que cuando ví a Isabel esta receta no podía por mas que prepararla, además como todo lo que hace me gusta se que no me iba a fallar en esta ocasión. Ella las llamó Cookies con mucho chocolate, si es que ya con ese nombre es toda una invitación a prepararlas. Yo lo que he hecho ha sido meter algo de chocolate blanco para darle otro toque.

He llegado a la conclusión que me encanta hacer galletas, si estoy un poco aburrida en casa (bueno ahora no tengo tiempo), pues miro mi recetario y hago unas galletas, así siempre tengo por si viene alguien a casa, para desayunar o simplemente porque apetece. Y estas son geniales porque no hay que extirar masa, cortar... simplemente con hacer bolitas y aplatarlas un poco con la mano ya están listas para su horneado. Y lo bien que huele la casaaaaaa.

Batimos en un bol la mantequilla junto con el azúcar hasta tener una cremita, después incorporamos el huevo junto con la vainilla y seguimos batiendo.

A parte hemos tamizado la harina junto con la levadura, cacao y bicarbonato que se lo vamos incorporando a la mezcla anterior con una cuchara o batidora hasta tener una masa consistencia como para poder hacer bolas.

Incoporamos 120 gr de las pepitas de chocolate mezcladas y mezclamos bien todo.

Hacemos bolitas con la masa que vamos colocando en una bandeja de horno forrada, separamos las bolas unos  5  cm ya que crecen, y colocamos encima unas pepitas mas.

Introducimos en el horno precalentado a 200ºC durante unos 10 - 12 minutos, hasta que los bordes se vean crujientes.

Dejamos enfriar unos minutos en la bandeja para pasarlos a una rejilla donde enfriaran totalmente.

Para su conservación en caja metálica

Pese a las e´pocas en las que estamos que el fresquito ya está instalado, parece que no apetecen cosas frias, pero debo decir que una mousse siempre entra estupendamente después de una comida. También es necesario tomar calcio ya sea en leche o yogures cosa que a veces nos cuesta porque hay gente que no es muy de tomar lácteos, pero y si se lo damos camuflado en un rico postre??

No requiere demasiado tiempo de preparación, lo que mas lleva es nevera y ahí no tenemos que hacer nada. Si teneis invitados en casa y quereis dejarles un buen sabor de boca con el postre, os lo recomiendo al 100%.

Yo le he cubierto de una mermelada de frambuesa pero podeis utilizar lo que querais y solo también está bien bueno.

Remojamos las hojas de gelatina en agua fria.

Semimontamos la nata y reservamos en la nevera.

A parte fundimos el chocolate blanco con cuidado de que no se queme, e incorporamos la gelatina hidratada, hay que tener cuidado por los cambios de temperatura. Añadimos la mitad del yogur obteniendo una textura brillante y lisa, entonces ya incorporamos el resto del yogur y emulsionamos.

Vertemos sobre a nata semimontada a intervalos y mezclamos con movimientos envolventes.

Rellenamos los vasos e introducimos en el frigo al menos 3 horas.

Después cuando vayamos a comerlo agregamos mermelada de algún fruto rojo o la que mas nos guste, es preferible alguna un poco acidilla. 

Si entra mi madre hoy por aqui y ve esta receta, va a pensar ¡¡esta no es mi hija!! ¡¡me la han cambiado!! y es porque soy anticoliflor y antialubias verdes, pero he descubierto formas de cocinarlas que no me generan mucho mal rollo. El problema principal que tengo con la coliflor es el olor, y que simplemente cocida pues no me sabe bien, pero como os comento mas abajo hay una forma no de evitar el olor total pero si de apaciguarlo lo que hace que por lo menos no se coja manía antes de cocinarla.

Esta receta está sacada de un libro para niños "Preparados, listos,... espaguettis"  y es que yo en temas de verdura a veces soy como una niña. Y esto lo como sin rechistar por lo que si teneis peques en casa con el mismo problema, probadlo.

Lo primero es poner a cocer la coliflor para ello lo metemos en una cazuela con agua y un vaso de leche, esto hace que la coliflor quede blanca y no huela la toda la casa con la cocción.

A parte se derrite la mantequilla en un cazo pequeño, después añadimos la harina que cocinamos removiendo al menos 1 minutos o hasta que se dore.

Después vamos incorporando la leche poco a poco, hacemos una especie de bechamel nos tiene que quedar ligera y sin grumos.

Cuando ya esté lista cocinamos a fuego lento sin dejar de remover para que espese, retiramos del fuego y agregamos la mezcla de quesos rallados dejando un par de cucharadas para luego removemos bien hasta que el queso se haya derretido.

En fuentes colocamos la coliflor y después cubrimos con la crema de queso, espolvoreamos el queso que habíamos reservado y el pan rallado.

Introducimos en el horno a gratinar un par de minutos.

Hoy es el día internacional del Brownie, ¿por qué? pues ni idea creo que fué por la iniciativa de una serie de blogger que decidieron por twitter que el 11/11/11 fuese el día del brownie y ya por consiguiente el 11 de noviembre es el día de este rico postre.

La verdad es que ahora hay un día para todo y si hay que celebrarlo... pues se celebra!!! Hoy propongo un brownie de chocolate con un toque cítrico, de naranja, que con la Vitamina que tiene nos viene muy bien para el tema de catarros que ahora en Palencia se nota ya el frescor, en verano nos quejábamos porque aunque tardó en venir el calor... y lo hizo a lo bestia, y ahora le echamos de menos. ¡¡Vuelve buen tiempo!!

Ponemos en un cazo el chocolate, la mantequilla y el azúcar que colocaremos al baño maria, removiendo de vez en cuando dejando que se funda. Una vez listo retiramos del fuego y dejamos enfriar en un bol grande donde prepararemos toda la mezcla.

A parte exprimimos la media narja que mezlcaremos con su ralldura y batimos junto con los huevos, la vainilla y la sal.

Vertemos el preparado del zumo al de chocolate y meclamos bien. Después agregamos la mezcla de harina, caco y levadura tamizada que unimos hasta tener una mezcla homogénea.

por último agregamos pepitas de chocolate, lacasitos y la naranja.

Volcamos la mezcla en un molde cuadrado de 20 cm previamente forrado con papel e introducimos al horno precalentado a 180ºC durante 30 - 35 minutos, dependiendo si queremos que el brownie quede más blando o espumoso. Dejamos enfriar totalmente en el molde, antes de cortarlo en cuadraditos.

A veces no apetece complicarse la vida al preparar algo dulce, los cupcakes están muy de moda y yo he preparado bastantes, pero la verdad es que lleva su tiempo, sobre todo cuando quieres decorarles y que queden chulos.

La propuesta de hoy se queda a mitad de camino de ser magdalena y/o cupcake, ya que las magdalenas no van con cobertura, pero la que he preparado no es la típica de cupcake porque no tiene copete.

Pero da igual como la llamemos realmente porque con sinceridad están bien buenas (la gente que me conoce sabe qu eno se mentir), y no necesitamos tener mangas ni boquillas especiales.
Por lo que ya teneís tarea para el finde.

Batir la mantequilla con la leche condensada y los huevos. Por último se agrega la harina tamizada con la levadura.

Incorporamos el agua de azahar y mezclamos bien con lengua.

Rellenamos las cápusilas e introducimos en el horno precalentado a 180ºC durante 20 minutos.

Derretimos el chocolate junto con el dulce de leche, cuando esté homogéneo se incorpora la crema de brandy.

Con esta crema cubrimos cada magdalena.

Deberíamos introducir en nuestra a limentación más pescado y realmente no se porque no se hace, hay una cultura más de carne y el pescado a parte de ser muy bueno, el azúl con su omega 3 ayuda a bajar el colesterol.

A veces creo que es por vaguería, en los niños el tema de espinas les vuelve locos pero hay muchas variedades de pescado que bien limpios se pueden comer sin ese "peligro".

La receta de hoy es de las que podemos considerar para novatos, estudiantes que se han quedado sin el tupper de las mamas o que no quieren comer mas pasta o arroz. Bueno y para elresto también.

Una receta de esas que casi se hacen solas ya que el gran cocinero... el horno, es el encargado.

Preparamos un majado picando el ajo con el perejil y lo mezclamos con el aceite, limón y vino blanco lo mezclamos bien.

Las truchas las tendremos limpias por nosotros o desde la pescaderia, por lo que sólo hay que salarlas un poco por fuera, y en medio le ponemos 1 loncha y media de jamón, mas que nada para que quede bien rellena.

Ponemos las truchas en una fuente apta para horno y bañamos con el majado.

Introducimos en el horno precalentado a 200ºC durante 25 minutos y listo.

Yo hoy le he acompañado con un pisto de verdura y así plato completit, pero se puede hacer también con ensalada, patatas fritas...